EN INSTAGRAM

Sígueme también en Instagram

viernes, 28 de octubre de 2011

AURATUS 2010. Alvarinho y trajadura. Vinho Regional Minho.Portugal.



Este vino sorprende desde el principio. Tiene un color dorado algo opaco, incluso cobrizo, muy lejos de esos colores amarillos brillantes que quedan tan bien en las fotos de catálogos y anuncios. Además tiene materia en suspensión y algunas burbujitas, resto de carbónico.


En nariz muestra una estimulante complejidad. Empezamos con aires florales y de fruta blanca (manzana de las de asar); pero pronto advertimos notas herbáceas y balsámicas, como de eucalipto o pinar. También hay recuerdos de tierra húmeda, de fondo de bodega.   

 En boca presenta una entrada donde se combinan acidez y dulzor, con su puntito de burbujeo juguetón. El paso es aromático, dejando una sensación muy placentera. Es de esos que, pasado el tiempo, sugieren comentarios como: ¡qué bueno! 

Un vino para beber en cualquier momento; antes, con,  y después de comer. Combina muy bien su frescura con cierto carácter de vino serio, con peso en boca y muy largo.
Su precio es, además, toda una invitación a probarlo, 7,90 € en La Tintorería, de Madrid.
¡Salud!
REPETIMOS
Lo hemos probado de nuevo ocho meses después. Visualmente ha perdido las burbujas del carbónico. En nariz se mantiene con su complejidad, y, en boca, muestra su talla de gran vino. Excelente acidez, que está ahí, sin irritar, y un tacto untuoso y elegante que le hace muy placentero. El recuerdo, larguísimo.
¡Salud!  

jueves, 27 de octubre de 2011

LA BRUJA AVERÍA 2010. Garnacha. Madrid. España.

 Tras el buen recuerdo que nos dejó el Picarana de Bodega Marañones, probamos este tinto que es el fruto de la colaboración de su enólogo, Fernando García, con Daniel Gómez Jiménez-Landi, de Jiménez-Landi y con Marc Isart, de Bernaveleva. Todos ellos forman el Comando G, una tropilla de intrépidos elaboradores que buscan, suponemos, que disfrutemos  con sus vinos tanto como ellos lo hacen al elaborarlo.  


Parten de unas pocas hectáreas de viñas viejas en Cadalso de los vidrios y Rozas de Puerto Real asentadas en suelos graníticos en los que  se llevan a cabo técnicas  biodinámicas. Cuentan a su favor con una altitud significativa (unos 1.000 metros), que permite equilibrar a los vinos (el verano madrileño es muy cálido y seco) . El vino permanece cinco meses en barrica de roble francés y de ahí, a la botella.
Y cuando la descorchamos nos encontramos con una capa sorprendente, por lo ligera; y con un color cereza suave, alejado de los brillos e intensidades habituales en los vinos jóvenes.
En nariz comenzamos por advertir una rusticidad como de hollejo, junto a notas minerales. Con el tiempo el vino se abre y parece florecer. Una excelente fruta se asoma y nos regala un vino perfumado y elegante, sin excesos. Sorprende que su graduación (14.5%) pase inadvertida.
¡Buen trabajo, Comando G! El vino resulta excelente para beber entre amigos, con o sin comida de por medio.
Nos costó 11,90 en Lavinia.
¡Salud!

LA MALKERIDA 2010. Bobal. Utiel-Requena. España.

Original nombre para un vino. Tiene que ver, según leemos en la contraetiqueta, con el intento que sus creadores, el sumiller Bruno Murciano y el enólogo David Sampedro, de rescatar del olvido, de dignificar, una variedad autóctona como la bobal. Así que, entre los límites de Castilla-La Mancha y la Comunidad Valenciana, se cultivan las viñas que dan origen a este vino.
Jordi Melendo en  elmundovino.com escribe sobre este proyecto
y nos informa de que la base son unas pocas hectáreas de viñas viejas y de que en la elaboración no hay madera. Se busca un vino joven de calidad y con mucho potencial.

Es de capa media y tiene un precioso ribete color fresa ácida.
En boca encontramos recuerdos terrosos, acompañados de notas aromáticas mediterráneas (romero) y un fondo de fruta roja muy agradable.

En boca muestra buena acidez y unos taninos que al principio, nos parecen algo secantes aunque, una vez aclimatado el paladar, no nos distraen. El vino resulta muy agradable de beber, con una frescura que no es habitual en los vinos mediterráneos actuales.

Tiene además el atractivo de la variedad, con sus notas distintivas, a lo que se suma un precio excelente: 6,50 en La Tintorería, en Madrid.
¡Salud!


martes, 25 de octubre de 2011

ALGUEIRA PIZARRA 2009. Mencía. Ribeira Sacra. España.

 Nos gustó tanto la experiencia anterior, con el Merenzao,  que repetimos con la bodega Algueira. Hoy toca el Pizarra, un vino elaborado con la variedad mencía y con una crianza de 13 meses en fudres.
No podemos olvidar el vino anterior y por ello lo utilizamos de referente. Este vino es de capa más alta, con un ribete rojo rubí.


En nariz encontramos  buena fruta roja acompañada de los recuerdos minerales que advertimos en el Merenzao y también el toque "rústico" que tiene la mencía y que nos encanta ver reflejado en los vinos.
En boca resulta más potente que el Merenzao. Su acidez es estupenda, haciendo de este Pizarra un vino fresco y largo, bien estructurado. Hay unos taninos más firmes, aunque no desagradables, y una sensación de mayor volumen en boca, quizá porque tiene medio grado más de alcohol (14%) y presenta un tacto más untuoso.
Buen vino este Pizarra, aunque si lo comparamos con el Merenzao nos tenemos que decantar por el segundo, que nos pareció más elegante y sugerente.
Tiene un precio de unos 30 euros.
¡Salud!

lunes, 24 de octubre de 2011

ALGUEIRA MERENZAO 2009. Merenzao. Ribeira Sacra. España.

De la bodega Algueira ya hemos escrito con ocasión de nuestra visita en el mes de agosto. Probamos algunos de sus vinos y nos gustaron mucho. Hoy toca adentrarnos en su gama más alta, comenzando por este merenzao. Se trata de un vino elaborado a partir de una variedad autóctona gallega que, suponemos, habrá recibido por parte de Fernando un muy buen trato en los bancales del Sil. En la bodega,  Raúl Pérez puso su arte.  Cepas viejas, uva pisada y una fermentación de siete meses en roble francés no nuevo son parte de su fórmula. 

Es un vino de capa media y de color rubí. En nariz resulta estimulante, ya que no nos encontramos con los aromas típicos de los tintos españoles actuales sino que apreciamos poderosos recuerdos terrosos. Esa mineralidad se acompaña de muy buena fruta roja madura (que no sobremadura) y suaves notas tostadas.
En boca resulta aún mejor. Es ligero pero sabroso, cuenta con una excelente acidez y unos taninos frutales agradables. El vino estimula todo el paladar y parece concentrarse en el centro de la lengua. El carácter frutal se acentúa si cabe en boca.Es larguísimo y elegante. Un vino que invita a beber, y que se puede beber solo o acompañado con el maridaje que cada cual considere.



 Su precio ronda los 30 euros (30,5€ en La Tintorería). Hay que tener en cuenta que es un vino muy exclusivo por el trabajo que conlleva y su escasa producción. Eso sí, resulta muy placentero.
¡Salud!

SEGUNDA CATA
Volvemos a probar otro Merenzao de Fernando Algueira dos años y medio después y nos sigue pareciendo una verdadera delicia. Vino para disfrutar con o sin comida. Se da la circunstancia de que lo hemos catamos a ciegas junto con un vino del Jura, Le Garde Corps 2010, elaborado con una uva muy similar, la trousseau, y nos ha sido difícil escoger cuál nos ha gustado más. El parecido entre los dos ha sido muy evidente, quizá algo más de mineralidad en el francés y un carácter más frutal y floral el gallego. 
¡Salud! 

domingo, 23 de octubre de 2011

PICARANA 2010. Albillo. Madrid. España.


 En la Comunidad de Madrid se hacen muy buenos vinos, como hemos ido comprobando  a lo largo de  estos años. Hoy presentamos un blanco de la bodega Marañones, situada en San Martín de Valdeiglesias,  donde Fernando García está llevando una interesante labor en las estribaciones de la Sierra de Gredos: suelos graníticos y pobres, cepas viejas que estuvieron a punto de desaparecer, técnicas biodinámicas en el cuidado del viñedo...; son algunas de los ingredientes que integran su proyecto.
Centrándonos en este Picarana, diremos que tiene una nariz discreta, en la que las notas herbáceas son dominantes. Con el tiempo (y según el vino va ganando temperatura) aparece una madera suave que le da complejidad y elegancia (no es de los vinos que atufan con sus notas tostadas y acarameladas).
En boca teníamos cierta precaución al ver que su graduación alcohólica es del 14.,5%. Sin embargo el vino tiene una acidez excelente, que la equilibra y le da una largura estupenda. Aquí está su fuerte; hay untuosidad, resulta sabroso y estimulante. Muy placentero.
Todo un descubrimiento. Vamos a buscar otros vinos de la bodega para hacer un seguimiento más exhaustivo. El vino nos costó 11,90 en Lavinia.
Celebramos con este vino nuestra entrada 500. Seguimos con ganas y esperamos que llegue pronto la número 1000.
¡Salud!

AMADÍS 2004. Garnacha, cariñena, cabernet sauvignon, syrah y merlot. Priorat. España.

Volvemos a probar un vino de la bodega Rotllan Torra, que los elabora en la localidad de Torroja del Priorat, en Tarragona. Este es el tercero, tras el Tirant, el más alto de la gama, y el Moscatel. Tanto este Amadís, como el Tirant, son vinos de alto reconocimiento internacional, con puntuaciones de Robert Parker muy por encima de los 90 puntos. Y es que se acomodan muy bien a lo que estos mercados, y este crítico en particular, valoran especialmente de un vino: fruta muy madura, colores muy subidos y muchos aromas dulces procedentes del roble de la crianza. Bueno, pues este Amadís da mucho de todo esto.
En la copa se nos muestra con una capa muy alta, picota intenso, con un ribete todavía vivo. Es un vino que, lo dice también la etiqueta, tiene un potencial de guarda de al menos 15 años. Aparece muy cerrado en nariz y es necesario esperar mucho a que se abra o decantarlo. Nosotros hemos esperado, pues es una pena perderse todo el proceso de evolución de un vino mientras se oxigena y, además, no teníamos prisa. Al principio dominan las notas de la crianza: cedro (lápiz), humo, caja de puros, regaliz, chocolate (bombón de licor). Con el tiempo, hasta una hora después, surge la fruta, compota de frutos rojos (arándanos) y las especias (vainilla, clavo), pero siempre de forma discreta, muy por debajo de los aromas iniciales que dominan en todo el proceso de la cata.
Botellero de la bodega Rotllan Torra
La entrada en boca es golosa, con unos taninos suaves y un paso agradable. Es potente, carnoso e intenso: se nota que ha habido mucha extracción en su proceso de elaboración (ya nos lo anunciaba su color). El posgusto deja recuerdos, otra vez, a regaliz y a cereza en licor. Su grado alcohólico es de 14%. Se nota en el aroma a bombón de licor y en ese retrogusto a mon chéri.
Para quien guste de este tipo de vinos potentes, con fruta muy madura y enorme presencia del roble, que sepa que se tiene que gastar los entre 25 y 30 € que cuesta. Y que luego valore si la relación calidad-precio-placer merece la pena.
¡Salud!

sábado, 22 de octubre de 2011

MISTRAL 2010. Garnacha, syrah, mourvédre y cariñena. Cotes du Rhone. Francia.

Volvemos a Francia para probar este tinto joven que nos ofrece, nada más servirlo, aromas a mosto, a hollejo, que ya hemos identificado en otros vinos, como algunos biodinámicos (Marcel Richaud es un notable productor de vinos naturales); y, recientemente, los gallegos de Algueira o Forjas del Salnés.
También percibimos notas que podríamos calificar de minerales. Nos hemos acordado de los vinos de Cos, la bodega siciliana que presentamos hace unos meses, que elabora en tinajas de arcilla. Muy pronto se asoma la fruta roja madura y también notas de hierbas aromáticas mediterráneas.
 
En boca tiene una entrada dulce, bien combinada con la acidez,  que también aguanta el peso del alcohol (14,5%). Resulta muy agradable, sabroso, con recuerdo frutal persistente.
Además tiene un precio muy atractivo: 10,40 € en Lavinia.
¡Salud!

CATA DE CHAMPAGNES ROSÉS EN LA UEC.

El martes 18 de octubre asistimos en la sede de la UEC a una presentación de champagnes rosés a cargo de Juanma López Terceño, sumiller corporativo de Makro España. 
Antes de catar los vinos que nos había traído, dio una breve conferencia acerca de la región de Champaña y de sus conocidos vinos espumosos. 
La Champaña está situada al norte de Francia, en la zona límite del cultivo de la vid por los riesgos de heladas, la excesiva pluviometría y las escasas horas anuales de sol . Por eso sus vinos son tan excepcionales, pues son casi un milagro en esas condiciones. La viticultura en esta zona está documentada desde la colonización romana en que los vinos de Champaña y Borgoña eran los más conocidos y apreciados de toda la Galia. Pero hay que llegar hasta el siglo XVII para que aparezca el personaje decisivo en la invención de los vinos espumosos que darán fama mundial a esta región: Pierre Pérignon. Este monje de la abadía de Hautvillers, cercana a Reims, ya había descubierto la segunda fermentación pero aún no había encontrado un método adecuado para retener las burbujas en las botellas. La solución la encontró al observar que algunos peregrinos españoles cerraban sus cantimploras herméticamente con tapones de corcho.
Hoy la  región de Champagne la conforman 319 pueblos en los que se reparten unas 300.000 parcelas con una media de extensión de 1,5 has cada una. Por sus suelos y por su clima, se subdivide en cuatro subzonas: la montaña de Reims, la más alta, con suelos calcáreos y marga, donde predomina la pinot noir; la Côte des Blancs, con un clima más constante, de uva chardonnay; el valle del Marne, de suelos arcillosos más ricos, con predominio de la pinot meunier; y la Côte des Bar, que linda ya con la Borgoña y donde se da sobre todo la pinot noir. Lo más destacado de los suelos de la Champagne es que fueron zona marina y hoy son abundantes en fósiles y sedimentos marinos, que aportan una gran riqueza aromática a sus vinos. Además, tiene abundancia de agua en el subsuelo, lo que hace que las cepas aguanten bien el verano. Y su color blanco, que refleja los rayos del sol, compensa las escasas horas de sol anuales y permite la correcta maduración de las uvas.
Pinot meunier
Las cepas mayoritarias son la pinot meunier, la pinot noir y la chardonnay; con casi un tercio cada una en el porcentaje total de cultivo - aunque es un poco superior en las pinot. También existen otras variedades muy minoritarias permitidas.
Pinot noir
Chardonnay
La elaboración del champagne está muy regulada. La vendimia dura unas tres semanas y en ella trabajan alrededor de 100.000 personas. Toda esta uva se prensa en lotes de 4000 kg., de los que sólo se usan para la cuvée  los 2050 l. de la primera prensada y 500 l. de una segunda prensa, que se denomina taille. Para el rosado se siguen dos métodos distintos: la mezcla de vinos tintos y blancos, que no se permite en el resto de Europa; y la maceración de mostos de uvas tintas. La fermentación alcohólica ocupa entre una y tres semanas. Se considera que cuanto más corta sea, sobre todo para los tintos, mejor. Está generalizada la siembra de levaduras; son muy pocos los que utilizan levaduras naturales. La fermentación maloláctica nuchos vinos blancos no la realizan para que no haya pérdida de acidificación y tengan más longevidad.
Juan Manuel Terceño
Es muy importante el arte del ensamblaje, o sea, la combinación de vinos de cepas y añadas distintas. Por eso el champagne sale como vino sin añada, salvo el millesimé, que es el champagne de añada que solo se elabora en años excepcionales. Tras el ensamblaje, al vino se le añade el licor de tiraje y las levaduras, y se embotella para que tenga lugar la 2ª fermentación y se convierta en un espumoso. Se busca que el carbónico residual alcance 6 atmósferas de presión, mucho más que en el cava. Las botellas reposan un mínimo de 15 meses para que se integren las lías y el vino vaya adquiriendo complejidad y aromas terciarios. Mientras tanto, a las botellas cada cierto tiempo se les va dando un cuarto de vuelta para que se vayan colocando boca abajo y las lías caigan hacia el cuello. Cuando llega el momento, tiene lugar el degüello por congelación y el embotellado definitivo. 
Estos son los champagnes rosés que degustamos:
AUBRY ROSÉ BRUT. 60% chardonnay, 25% pinot noir y meunier, 15% vino tinto. De color piel de cebolla y burbuja muy fina. Destaca la bollería fina (autólisis avanzada), las notas florales, de cítricos y de lichis. Es seco en boca, como corresponde a la chardonnay. Cítrico. La espuma está muy bien integrada. Amargor cítrico al final. PVP. aprox. de 35 €.
PAUL DETHUNÉ ROSÉ BRUT. Se trata de un Grand Cru con un 80% de pinot noir y un 20% de chardonnay (la mitad es un vino de reserva de dos años mínimo de barrica). La pinot le da un color más subido. Hay pétalos de rosa, notas cárnicas y ahumadas. También mineralidad (tiza, goma de borrar) y lácticos. En boca hay fruta roja (mora) y buena combinación de lácticos, minerales y fruta madura. Es amplio, pero el carbónico está menos integrado. Es más calido y se aprecia una mayor vinosidad. El posgusto es largo e intenso, con un puntito de astringencia. Tiene carácter de vino mediterráneo. Sale por unos 40 €.
PAUL BARA GRAND ROSÉ BRUT. 90% de pinot noir y 10% de Coteau Champenoise de Bouzy. Solo se elabora con vinos de cuvée, no hay taille, de un mínimo de 4 años. Tiene complejidad de vino tranquilo con evolución. Notas ahumadas procedentes de la crianza del vino tranquilo y pétalos de flor marchita. Tiene una vinosidad extraordinaria. Es ligero, con volumen, seco, mineral, con una astringencia delicada y un final amargo y de recuerdo de fruto seco. Su precio es de 35 € aproximadamente.
TARLANT ROSÉ BRUT. Tiene un 85% de chardonnay y un 15 % de pinot noir. De color teja, más evolucionado. Aparecen notas minerales (tiza, yodo, suelo húmedo, recuerdo marino). En boca destaca la humedad cítrica y un gusto algo yodado. En el posgusto hay algo de escabeche. Tiene menos acidez que los demás, pero mayor concentración y salinidad. Es muy largo. Cuesta unos 35 €.
HENRI DE VERLAINE BRUT ROSÉ. Este y el próximo son productos de la Cooperativa Unión Champagne. Este es el rosé que distribuye en España Makro. Está elaborado con un 59% de chardonnay, un 34% de pinot noir y un 16% de vino tinto de pinot noir. Es el que mejor relación calidad-precio tiene (20 €). Se aprecia un toque dulce que lo hace estar en el límite para ser considerado brut. Da aromas cítricos, minerales, de fruto seco, de autólisis (humedad y tiza) y de lías. En boca es más goloso y vinoso. Hay gominolas y moras. Se queda en el centro de la lengua. Tiene un buen esqueleto.
DE SAINT GALL ROSÉ BRUT. 50% chardonnay, 34% pinot noir y 16% vino tinto de pinot noir. Al servir se aprecia una gran espumabilidad, con consistencia, que no se pierde inmediatamente. Hay bollería (brioche), flores blancas marchitas, chicle, fruta madura, cereza. En boca es amplio y graso, con un final amargo y con recuerdo de fruto seco que le aporta la chardonnay. Tiene una gran acidez y algo de astringencia y de tanicidad. Ronda los 30 €.
GOSSET GRAND ROSÉ BRUT. 58% chardonnay, 35% pinot noir y 7% vino tinto de pinot noir. Es el que forma la mejor corona en la copa, lo que denota una mayor calidad de fermentación en botella. Tiene nariz de uva tinta: fruta golosa y flor azul (violeta). Poca mineralidad. Se aprecia el tostado y las especias dulces procedentes del porcentaje de vino criado en barrica. Es el champagne con mayor volumen en la boca. Su entrada es cálida y golosa. Es graso y untuoso y tiene un recorrido no muy largo, pero un gran posgusto. El recuerdo final es de levadura con menta. Su precio aproximado es de 50 €.
¡Salud!

jueves, 20 de octubre de 2011

PEDRO XIMÉNEZ FERNANDO DE CASTILLA ANTIQUE. Jerez. España.

 Hacía tiempo que no nos tomábamos un vino dulce y ya apetecía. Así que, explorando en nuestros fondos vinícolas, descubrimos este Pedro Ximénez que compramos en nuestra visita a la bodega Fernando de Castilla (y que reflejamos en el blog ).

En nariz nos deja notas de dátiles, de miel, de higo seco o pan de higo; y también de madera, de barrica vieja, de barrica de brandy.
Al probarlo descubrimos, tras su entrada golosa de zumo de pasa, notas de café, de naranja confitada. Resulta denso, sedoso, larguísimo y nada pesado.
Lo hemos tomado como postre, aunque también para merendar. Se nos han ocurrido muchos maridajes con él, especialmente con quesos. Su precio supera por poco los 30 euros (la serie Antique de esta bodega es la más alta de su gama), y da mucho placer.
¡Salud!

RECAREDO 2006 BRUT NATURE. Xarel-lo, macabeo y parellada. Cava. España.

 Lo probamos hace unos meses en un restaurante y nos gustó mucho, por lo que, pasado un tiempo, lo hemos catado en casa, en mejores condiciones. Entre tanto hemos ido conociendo aspectos de la bodega y sus creadores, Josep y Toni Mata (la tercera generación ), que desde Sant Sadurní d´Anoia realizan cavas cuidadísimos, desde la viña hasta la botella: cultivo ecológico,  uso de levaduras autóctonas, uso de vinos base propios, degüelle sin congelación del cuello de la botella...


Centrándonos en la cata, el cava muestra muy buena nariz, con notas de levaduras que con el tiempo se transforman en bollería, fruta blanca y recuerdos  cítricos.
En boca muestra muchas virtudes: acidez destacada, una espuma que combina tensión con cremosidad, un final largo con agradable amargor y elegancia. Es un cava seco, sin adicción de azúcar de expedición, que gustará especialmente a los habituales de esta bebida. Ideal para combinar con todo, o para beber solo.
Su precio ronda los 15 €, buen precio para la calidad que atesora.
¡Salud!

ENTREDICHO B+. Bobal. España.

A finales de mayo de este año asistimos en la Bodega Santa Cecilia de Madrid  a la presentación que el enólogo Pedro Olivares hizo de sus vinos procedentes de viñedos cultivados según principios biodinámicos. Uno de esos vinos es el que vamos a comentar hoy y, aunque ya lo probamos en el citado acto, ahora lo estudiamos con la atención y el detenimiento que cualquier vino exige y más uno como este que cuesta más de 50 euros.

Este Entredicho b+ está elaborado con un 100% de uva bobal. Se presenta con una capa media-alta, de color cereza y ribete morado. En nariz aparece, en principio, con notas frutales discretas. En la presentación de mayo anotamos notas de mango, pero ahora nos quedamos con aromas de fruta fresca, de pulpa y hollejo de uva. Cuando agitamos la copa, se intensifican y se hacen más dulzonas. No se detecta la madera, aunque la lleva - 16 meses en barrica nueva sin tostar -. Pasamos a probarlo y ahora la historia cambia con respecto al recuerdo que teníamos de este vino pues tiene una entrada muy potente, con unos taninos en punta que provocan una desagradable sensación de astringencia en lengua y encías que está presente tanto en el momento de la degustación, con el vino en la boca, como después, en el posgusto. Por lo demás, destacamos que se trata de un vino amplio, musculado y con buena acidez, pero no excesivamente largo. Sus 15º de alcohol exigen tomarlo ligeramente fresco pues, si no, resulta algo ardiente.
Por su potencia tánica, el Entredicho b+ no resulta adecuado como vino para amenizar una reunión o una conversación en torno a unas copas. Exige ser acompañado con comida de sabores igualmente potentes.
En conjunto, y teniendo en cuenta los algo más de 50 euros que nos costó en la Bodega Santa Cecilia de Madrid, la relación calidad-precio aparece bastante descompensada. Esperábamos obtener más placer de un producto tan caro.
¡Salud!

domingo, 16 de octubre de 2011

CASTILLO DE LIRIA 2010. Bobal y syrah. Valencia. España.

Hace algunos meses escuchamos en la radio a Luis Tolosa, autor de "Los supervinos 2011", una guía de vinos que se encuentran en los supermercados y que cuentan con precios inferiores a los 7 euros. 
Uno de los ejemplos que utilizó es este Castillo de Liria, que se elabora para Mercadona. Nos apetecía probarlo, porque conocemos muchos vinos de menos de 10 euros que están realmente buenos.
Presenta una nariz interesante. Los recuerdos de la uva bobal están presentes en forma de notas terrosas y hierba seca; pero también se aprecia fruta roja, que, con el tiempo, deriva en apuntes golosos que, imaginamos, procederán de la syrah.
En boca resulta agradable, con buen paso, ligero amargor y  buen retrogusto. Nada que objetar a este vino ligero, con una carga alcohólica (12,5%) muy llevadera.
Pues estamos ante un vino más que correcto con el que se puede plantear hasta una cena a la luz de las velas. ¿Quién dijo que el vino es caro? Muchos refrescos valen más, y hasta el agua mineral se acerca a los 1,49 que hemos pagado por este vino.
¡Salud!

LUIS DUARTE EN LA ROMANA

Hace pocas semanas, en la cata de la Vinoteca Tierra, conocimos a Adelino, un arquitecto portugués. Hablando con él, acabamos por citar los vinos del Alentejo y concretamente los Esporâo, que ya tenemos comentados en el blog. Pues bien, resulta que Adelino conoce a Luis Duarte, enólogo que los elaboró en su momento.
A partir de ese primer contacto con Adelino conseguimos comprar algunos vinos de esa región elaborados por Luis Duarte. Hablamos con Pili, la sumiller de la Taberna La Romana de Madrid, para ver si podíamos ir a catarlos con ella, y... aquí están.
Son siete vinos, todos del 2009, y con precios muy atractivos:


1.-MONTE DO CARRAPATELO BRANCO. Antâo Vaz y Viogner. 3,50 euros.
En nariz empezó discreto pero interesante. Suponemos que las lías han actuado dejando aromas peculiares, no usuales en los blancos, como cáscara de fruto seco (cacahuete), ceniza, incluso a medicina.
En boca resultó equilibrado, con buena acidez, cuerpo y de largo recuerdo. Agradable.


2.-RAPARIGA DA QUINTA BRANCO. Antâo Vaz y Arinto. 3,40 euros.
Más aromático que el anterior, con notas de manzana asada o acompotada y un puntito de hinojo y manzanilla.
En boca resultó más amable, con mayor intensidad de las notas dulces, aunque bien equilibradas con la acidez. También muy largo y agradable.


3.-RUBRICA BRANCO. Antâo Vaz, Verdelho y Viogner. 6 euros.
Algo más complejo que los anteriores, con recuerdos cítricos, de albaricoque y florales.
En boca apreciamos mayor cuerpo. Suponemos una fermentación en barrica. También equilibrado.

En este punto hicimos una pausa valorativa para acordar que estos tres vinos blancos tienen una relación calidad-precio magnífica. Poseen muchas virtudes: una nariz rica en matices y, sobre todo, una boca excelente, que deja un recuerdo muy largo y agradable. El primero destacó por su originalidad, pero el tercero, el Rubrica Branco, quizá sea el que gustará a un mayor número de personas. A nosotros también nos gustó. Hay que destacar que son vinos elaborados en la mitad sur de Portugal, en un clima cálido, pero su
excelente acidez les da mucha frescura y los hace más equilibrados.

Animados por este prometedor comienzo pasamos a los tintos.


4.-MONTE DO CARRAPATELO. Aragonés, Alicante Bouschet y Touriga nacional. 5 euros.
Mala suerte: el corcho mostraba contaminación y tuvimos que apartarlo.


5.-RAPARIGA DA QUINTA COLHEITA SELECCIONADA. Aragonés, Trincadeira y Touriga nacional. 3,70 euros.
Vino que ha permanecido 6 meses en barrica usada de roble francés y americano y que, en nariz, nos ha aportado notas tostadas de la madera y fruta madura. También apreciamos aroma a verdor, a vegetal. Esos tostados también se repitieron por vía retronasal, apagando un poco su frutosidad. El final dejó notas agrias.

6.-RAPARIGA DE QUINTA RESERVA. Aragonés, Alicante Bouschet y Touriga nacional. 7,50 euros.
La madera (doce meses en roble francés y americano) está mejor integrada que en el vino anterior. También se aprecian con nitidez las notas procedentes de la fruta madura. Resulta goloso, aunque los taninos necesitan más botella para pulirse.

7.-RUBRICA. Aragonés, Alicante Bouschet, Touriga nacional, Syrah y Petit Verdot. 10, 50 euros.
Criado en barrica nueva de roble francés durante 9 meses, la larga maceración que experimentó en su elaboración le dio un color muy intenso. En nariz nos llamaron la atención notas metálicas y lácticas (yogur de fresa).
En boca combina golosidad con cierta astringencia.

En conjunto los vinos tintos nos llamaron menos la atención porque, aunque muestran una correcta elaboración,  se hallan en la línea de modernidad común en muchas regiones y países, con mucha extracción de color, fruta muy madura y golosa y una madera bastante presente. No obstante hay que tener en cuenta que su precio es excelente, que son vinos que probablemente gustarán y que estarán mejor dentro de algunos meses. Interesante cata, la de los vinos de Luis Duarte. Nos quedamos especialmente con la calidad mostrada por los blancos, que son una apuesta segura.
¡Salud!